Falto
en la luz gris del semáforo
en la sombra del gato
en el vino de fiesta
falto
en el puño de arena
que te lanzas a los ojos cada día
en el título de SE ALQUILA
que llevas en el alma
falto incluso en mi alma
en la página arrancada de los libros
en cada color disparado por la espalda
en lo desteñido de los muebles
falto en los ruidos de cubiertos
en las madres
en las casetas de los centinelas
en el agua como un componente químico
que neutraliza su veneno
en tu instinto de conservación
y en tu desnudez falto
en todas tus navidades
en el pájaro que cruza la calle
con la luz extinguida de tus amabilidades
soy un faltante más
un profesional del espacio vacío
tengo práctica en instalar mi olor en habitaciones
sin entrar
por fortuna por donde paso tengo muros
para apoyarme
ustedes saben de lo que hablo
yo solo enumero señales
en la amenaza y su escarabajo
en el pie del niño que destruye hormigueros
en la ropa del frío
falto
ustedes también en este momento
faltan en algún lugar
falto en los escombros de tu risa
en la temperatura de esa ciudad
falto en la Biblia que Dios editó
especialmente para vos
trabajo el doble para faltar puntualmente
a tus citas
las canciones aprenden de mí
el oficio de abandonarte
en las arrugas de la ropa nueva
en el preestreno de tus películas
falto
en la codicia
de los saqueadores de pirámides
que te roban oro y arcilla
pero sobre todo en el albañil que une ladrillos
en edificios que construís para sentirte
acompañada
en fotos de familia
y en la falsa ternura de sus sonrisas
ya ves
faltar es un arte
sobrar cualquiera sobra
estar proporcionado también
pero faltar con tanta precisión
en los colmillos del perro que te come el amor
sólo lo sé hacer yo.
Nunca duermo de ese lado de la cama
tu amor muerto no lo quiere ceder
se cree con derechos
es un campesino
al que despojaron de su tierra
y vuelve por las noches
a cultivarla.
LOBEZNOS
Lo que caminas descalzo
ya nunca lo olvidas.
°
No por otro motivo
juro que escribo
para envenenarte el alma.
°
Es un niño
aunque por las estadísticas
y el aspecto
podría ser un pájaro muerto.
°
Ahí donde algunos dejan basura
para que otros coman
yo dejo poesía
para disimular el olor.
°
Nadie aprende a volar
hasta que inventa un cielo.
Te acuerdas de aquel te quiero
que se me escapó una tarde
hacia la montaña
que lo seguimos con focos y perros
selva adentro
porque no nos gustaba perderlos
hoy tantos años después
apareció convertido en animal grande
crecido
con anillos
y colmillos
y largo pelaje
creció silvestre
amamantado
por la Madre Intemperie
un te quiero salvaje
sin adicciones sin adiestrar
matando gatos del barrio
pero en defensa propia
carcomido de águilas
pero con respeto
fuerte
cojea al caminar
pero vuela al correr
un te quiero afilado
que mata gallinas
y no sabe comportarse en la mesa
que si hace calor
fabrica su propio frío
para la noche
ya ves no es una bestia
para domesticar
una fiera con garras
en el alma
que es donde más peligrosas son
prefiere dormir con hambre
que comer zacate
necesita la soledad
la sangre del desamor cuando oscurece
la inseguridad de no saber si amanecerá
vivo o triste
por eso lame mis dedos
aúlla a mi luna
hizo madriguera en el estanque
y aceptó quedarse.
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Descubriéndote, poeta. Qué fresca madurez es tu poesía.
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